En esta ocasión, me gustaría hablar de esta canción de la película de Frozen II. No haré un análisis de la película, sólo una reflexión sobre qué le pasa a Elsa durante este momento de la película y ayudarte a reflexionar a ti, sobre si como a ella, alguna vez has sentido la necesidad de ir mucho más allá.
Hablo de esa intuición que todos y todas tenemos, de nuestra conciencia mayor, de nuestra sabiduría interna que nos dice «eh, el camino es por aquí» y que nosotras y nosotros le hacemos oídos sordos. ¿Te ha pasado alguna vez?
«Deja tu pareja, no eres feliz con ella» «Emprende, es tu momento de ser feliz dedicándote a tu profesión por ti misma» «Di que no» o «Di que sí» «Hazlo, hazlo, hazlo» y tú muerta de miedo, lleno de dudas, llamando ruido a esa voz interna que necesita ser escuchada con atención para despacio, sin prisa, sin pausa, poder llevar a cabo su cometido.
Y hay algo curioso, que le pasa a Elsa y que en esta canción refleja «Viví ya mi aventura, y todo quedó ahí, tengo miedo de seguirte y arriesgarme a ir, mucho más allá» y es que parece que cuando hacemos una proeza, para nosotros mismos, sólo se hace una vez en la vida. Y no es así, estamos en continuo cambio y crecimiento, por eso es importante atreverse a ir mucho más allá.
Atravesando la barrera del miedo es cuando salimos de nuestra zona de confort y es cuando crecemos y por favor, créeme, eres un ser en crecimiento, desde naces hasta que mueres, eres puro cambio y pura transformación, respétate con tus ciclos, tus idas y venidas, tus subidones y bajones y hazlo, mucho más allá, un pasito sólo, uno pequeño nada más, pero uno que sea de no retorno.
En el transcurso de la peli, Elsa aprende a escuchar su voz interior, a vencer sus miedos y lo hizo sola, pues es que no hay otro modo que hacerlo por ti mismo. Lo tienes que hacer tú, sólo o en compañía con profesionales que te guíen en el camino, pero sabiendo que eres tú y sólo tú el que toma la decisión.
Así que salud y suerte, ánimo y amor por ti para que seas capaz de escucharte, atenderte y hacerte caso. Si yo puedo ir un poquito más allá cada día, tú también. ¡Nos encontramos en el camino! ¡Nos encontramos mucho más allá!